Los momentos felices merecen ser retratados, más cuando se logran a partir del impulso colectivo, de la fuerza propia del deseo.
Esto fue lo que creó la especial noche de Vicky, quien, con su personalidad fresca y encantadora, decidió celebrar sus XV rodeada de familia y verdaderos amigos, en la intimidad de su casa. La decoración corrió por su mamá, su hermana y ella, ambientado todo en el amor por la música y por París. Una simpleza que decía todo, su sencillez la hacía resplandecer entre todos.
La noche de Vicky fue única y especial, el tipo de encuentro en el que amamos estar y poder contar.
Les dejamos las postales de aquella noche, esperando las disfruten y los haga vivir un poquito de ese momento.